En nuestro país no hay nada como ser un político corrupto. Por desgracia esa especie abunda en nuestro país y no hay nadie que ponga solución al tema, entre otras cosas porque son ellos quienes se encargan de aprobar las leyes que les permiten robar todo lo que les da la gana sin tener que pagar por ello.
Eso explica que elementos como el hijo mayor de Jordi Pujol, ex presidente de la Generalitat, pueda tener a su disposición una nave industrial en la que guarda con mucho mimo y sigilo una colección formada por 20 coches deportivos o de alta gama, y no son precisamente maquetas de las que vende por fascículos el Grupo Planeta. Lo que ha tenido que trabajar ese hombre para tenerlos, ¿no? Bienvenidos una vez más a Españistán, o Cataluñistán, como prefiráis.
SEGUIR LEYENDO «Los cochazos del hijo de Jordi Pujol»