Los 7 mejores coches japoneses para hacer Drift


Hoy en día el Drift es un estilo de conducción bastante popular. Se originó en Japón en la década de los 70 y desde entonces su popularidad ha traspasado todas las fronteras. Por aquél entonces, los conductores que descendían las altas montañas se valían de esta disciplina para estar “preparados” ante los estrechos caminos y sus precipicios. Muchos de los fabricantes de vehículos japoneses disponen de una gama de modelos hechos con ese ADN especial que los hace óptimos para derrapar sobre el asfalto. Veamos cuáles han sido los mejores coches nipones de las última décadas para hacer Drift.

Toyota GT86


El Toyota GT86 llegó a Europa enseñando sus dientes como un vehículo deportivo equilibrado que destaca por su buen comportamiento de dirección y estabilidad en la carretera, además de por contar con unos neumáticos fantásticos. Aun así, también destaca por un precio en el mercado demasiado desorbitado. Con 200 caballos de potencia y 1200 kilos de peso, se trata del modelo que tiene el récord Guinness de drift en llano sobre asfalto. A los pedales de un Toyota GT86, el piloto Harald Müller recorrió 144,12 kilómetros dando 612 vueltas a un circuito en dos horas, 25 minutos y 18 segundos.

Nissan 350Z


El 350Z de Nissan se amolda a la perfección del estilo Drift por su excelente tracción trasera, un motor V6 de 3.5 litros y algunas características al volante tan depuradas que nos atreveríamos a pensar que han sido impuestas únicamente para realizar esta disciplina. Los trompos de 360 grados y los derrapes límites parecen la especialidad de un deportivo que ha sido incluido en el Gran Turismo 6 y que simboliza un nuevo éxito de la casa japonesa. ¿Estará a la altura su segunda generación? Se espera para septiembre de 2015.

Nissan Skyline


El legendario Skyline es todo un icono del motor que pertenece a esa galería de culto donde solo entran los más modelos más destacados e influyentes que existen. El Skyline es uno de los modelos originales para Drift que más modificaciones ha visto desde su ‘restyling’ en 1989, cuando empezó a adoptar una mecánica más tuning y un motor de 280 CV de potencia generada por el bloque RB26DETT.

Toyota Supra


Muchos lo conocieron en ‘Need For Speed’. Hoy es uno de los modelos de culto más conocidos del mundo gracias a su buena apariencia, su motor de doble turbo, un excelente rendimiento y cómo no, una estrecha relación con el Drift. Apareció en los años 70 como una variante del Corolla, aunque la llegada del Mark 4 en los años 90 (con un importante cambio estético, un pronunciado alerón trasero y la llegada de motores turbo y atmosférico) lo llevó a forjar lo que hoy es su leyenda.

Mazda RX-7


El mito está en la calle; todo aquél que consiga hacer un buen ‘drifting’ con el Mazda RX-7, lo podrá hacer en cualquier coche y cafetera del mundo. Es un modelo deportivo complicado en estabilidad y mecánica, aunque el famoso motor Wankel hacía las delicias a revoluciones altas. Dispone de 3 generaciones desde 1978 hasta 2002 (aunque esperamos su retorno en 2017, tal y como confirmó el responsable de desarrollo Nobuhiro Yamamoto) y participó en importantes campeonatos como las 24 horas de Le Mans.

Nissan 200SX


Si te gusta el Drift y no quieres rascarte los bolsillos, quizás debas buscar una alternativa «económica» como Nissan 200SX de quinta generación (1993-1999) para probar tus capacidades en un circuito. El denominado “Silva” en Japón (en su versión S14), trajo consigo una configuración totalmente orientada al Drift que destacaba por su relación de peso – potencia y un robusto pero potente motor SR20DET 2.0 Turbo de 220 caballos de potencia.

Honda S2000


Pocos sabían en 1999 que el Honda S2000 se convertiría en uno de los modelos preferidos por los aficionados al Drift. En 2004 todas las dudas sobre él se disiparon tras la salida de una nueva versión con llantas de 17 pulgadas, nueva puesta a punto de la suspensión, una sorprendente tracción trasera y un motor VTEC de 2.0 litros y 220 caballos de fuerza. Dicho esto, el Honda S2000 (llamado así como homenaje a S500, S600 y S800, coches deportivos de Honda en la década de 1960), no solo fue una máquina fantástica, sino que su salida del mercado dejó un vacío en el paisaje automovilístico que aún no se ha llenado

1 comentario

  1. …buenas,antes de todo,felicitar por toda esta informacion.soy nuevo en el tema de los motores jopeneses….salvo por el 3000gt y por los lancer evo.yo ando con un s2 del 96 y con un sierra cosworth del 92..la verdad que ando mas en el s2 cuando voy al curro,con la familia en el otro..alguna vez me he visto apretado poralgun nissan que tiran como diablos..los tienen q forjar en el infierno..seguro.me encanta el drit…me tengo que hacer con un diablo de esos japoneses…de lado a lado todo el dia…saludos

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