¿No eres un gran piloto pero te gustaría experimentar lo que se siente al dar una vuelta rápida en un Porsche en el circuito de Liepzig? Ahora lo tienes más fácil que nunca gracias a la nueva iniciativa de la marca alemana, que te propone subirte a cualquier modelo de su gama de vehículos para que descargues adrenalina.
No olvides ponerte el cinturón…
Un piloto profesional se encarga de pisar el acelerador a fondo mientras tú disfrutas de un paseo frenético como copiloto, lo más parecido a cuando tu padre tiene prisa por llegar a un sitio y se va saltando los semáforos.
Por 98 euros puedes subirte a un Porsche Cayenne Turbo de 500 CV que pesa más de dos toneladas. Si prefieres decantarte por una ruta off-road, tienes que pagar un poco más, 135 euros.
Subirte en un confortable Porsche Panamera (en el asiento del copiloto o en los de atrás, tú eliges) cuesta 125 euros, mientras que hacerlo en un Porsche 911 cuesta 155 euros. Además, si esos modelos te parecen poco deportivos puedes decantarte por un Porsche 911 GT3 Cup, aunque en ese caso deberás desembolsar 210 euros por la vueltecita.