Que las cosas van viento en popa en China no es algo que voy a descubrir ahora. Muchas firmas se han dado cuenta de ello y es por eso que están apostando muy fuerte por ese nuevo mercado, el del gigante asiático. Allí la venta de coches no para de crecer y por eso no es de extrañar que durante 2010 se haya batido el récord de coches vendidos.
En total se vendieron 18.061.900 unidades de un total de 18.264.700 unidades fabricadas en 2010. Evidentemente, son cifras que asustan a cualquiera y que dejan claro que allí no hay problemas de demanda. El récord histórico de ventas anuales lo poseía Estados Unidos, país que en 2000 logró vender 17,4 millones de unidades, que tampoco está nada mal. Sin embargo, en este último mercado las cosas han cambiado mucho y en 2010 «sólo» se han vendido 11,7 millones de unidades en 2010.
Las ventas han incrementado en China un 32% respecto a 2009, una subida que creo que ni el más optimista imaginaba. Los últimos 12 meses han sido una locura, sobre todo porque el Gobierno ha incentivado la compra con unas medidas que desde el 1 de enero de 2011 ya no existen. El mes de diciembre fue el mejor porque muchos chinos trataron de aprovechar las ayudas antes de que caducaran, por lo que se vendieron 1,86 millones de unidades, más o menos lo que se ha vendido en España durante 2010.
Lo más increíble de todo es que las previsiones para los próximos años son muy buenas. Se espera que esa cantidad aumente, sobre todo porque cada vez son más los modelos disponibles. Allí no entienden de crisis y para 2011 se prevé un incremento de entre un 10 y un 15 %. Ojalá pudiéramos decir lo mismo en España…