Tengo que reconocer que todavía tengo pesadillas con lo que me sucedió años atrás después de sufrir un accidente que rayó una parte de mi coche. Resulta que lo llevé a uno de los talleres recomendados de la que por aquel entonces era mi compañía de seguros (Clickseguros). Lo hice porque te limpiaban el coche gratis tanto por dentro como por fuera, así que decidí que era la mejor opción. ¿Qué pasó? Pues que me engañaron vilmente.
Me cobraron 750 euros justos con el IVA incluido, que era lo que tenía acordado pagar como franquicia en caso de accidente. No le di demasiada importancia porque pensé que me darían la razón, pero finalmente no me la dieron ni a mí ni al motorista con el que me crucé, así que no tuve más remedio que pagar los 750 euros sin rechistar. Curioso que la factura ascendiera al valor de la franquicia, ¿verdad? Demasiada casualidad para cuadrar hasta el IVA.
Se acabaron los atracos
Por suerte, historias como la mía no sucederán con tanta facilidad gracias a una aplicación llamada IRE que ha desarrollado Audatex. Se basa en unos estándares que según la firma son «100% demostrables y objetivos» para determinar el tiempo de mano de obra y los materiales que hay que utilizar para reparar el coche. De esta forma no hay que confiar en el taller o en el perito de turno, lo que hace que todo sea mucho más ágil siempre y cuando todas las partes implicadas decidan recurrir a ella.
El gran beneficiado es el cliente final, pero el taller puede salir perdiendo porque ya no le queda tanto margen para inventarse unos costes falsos. Además, creo que las aseguradoras también pueden salir ganando, ya que es una forma de estandarizar las valoraciones sin que el perito y el trabajador del taller tengan que sacarse los ojos.
En Audatex aseguran que cada perito puede ahorrar hasta 7 minutos por operación, así que la cosa promete. Ahora solo falta que se expanda lo antes posible.