Los fusibles son imprescindible son cualquier circuito eléctrico porque sirven de protección en caso de sobrecargar. Si se rompen será necesario cambiarlos. No obstante, en el mercado vas a encontrar muchos tipos de fusibles para el automóvil y por lo general son económicos, pero cuando vayas a comprarlos no te los venderán individualmente sino en un set de varias unidades. Toma nota de los pasos que tienes que seguir como alternativa económica del recambio.

Primero debes averiguar qué fusible se quemó, para ello tienes que localizar qué elemento no funciona, tener el manual a mano te ayudará a detectarlo. Luego deberás observar la caja de fusibles y revisar uno por uno hasta detectar cuál está dañado. Lo descubrirás fácilmente porque tiene un corte en el filamento que une sus dos extremos: cuando hay una sobrecarga de corriente, se funde y deja de hacer contacto, por eso debe cambiarse.

Luego, extrae el fusible dañado con mucho cuidado y paciencia. Si no tienes el repuesto correcto o es imposible encontrar uno, será mejor que repares el original. Para ello, corta con un cúter la parte del plástico en la parte superior para tener más espacio. Une nuevamente con la pinza los extremos cortados con mucho cuidado de no dañar el fusible. Entonces, busca la manera de que no se deshaga el contacto físico (aprisiónalos con la pinza).

Si ves que no se sostienen unidos, puedes reforzar la unión con una soldadura. Si tienes disponible un soldador electrónico y un poco de estaño, suéldala el mínimo indispensable. Con la pinza, vuelve a colocar el fusible en su posición original. Finalmente, prueba el circuito o elemento asociado al fusible para verificar si el problema persiste y si el fusible soporta la resistencia. En caso contrario, no tendrás más remedio que cambiarlo.

Es importante que este verano el aire acondicionado de tu coche no te falle, para ello debes realizar el mantenimiento del equipo durante todo el año. El aire acondicionado pierde cerca de un 5% de su eficiencia cada año de uso, pero si le das un mantenimiento correcto, mantendrá el 95% de la eficiencia original y siempre podrás conducir sin pasar calor. Toma nota de todo lo que tienes que tener en cuenta para su cuidado.

En invierno intenta encenderlo durante unos minutos, por lo menos una vez al mes, para hacer circular el fluido y así evitar que las juntas de las tuberías y los componentes se resequen. Es tan sencillo como enchufarlo un rato para que funcione y luego apagarlo si no lo necesitas, recuerda que este sistema consume carburante, especialmente cuando el auto está en movimiento.

Al acercarse el período más caluroso revisa y limpia todo el sistema de refrigeración del automóvil, comenzando por el radiador, ya que este elemento es fundamental para que funcione por más tiempo. Limpia el exterior con agua y detergente, revisa el nivel de líquido refrigerante y cámbialo por uno nuevo si ves que falta y asegúrate de que las cañerías no presenten pérdidas o fugas por todo su recorrido.

A continuación, verifica la carga del gas que realiza el enfriamiento del circuito, esto es recomendable hacerlo cada dos años o cada 20.000 kilómetros. Para ello, deberás llevarlo a un taller profesional que disponga de las herramientas adecuadas, pero como usuario es tu responsabilidad programar esta revisión.

También conviene revisar las correas del sistema. Si notas que están flojas, ajústalas de manera que impulsen adecuadamente al compresor. Si la correa presenta signos evidentes de deterioro, será momento de cambiarla por otra nueva. Finalmente, mantén limpio el cuerpo del condensador, basta con pasar un poco de agua. Recuerda no usar el AA con las ventanas bajadas, ya que su efecto será nulo.

La empresa Klan acaba de sacar al mercado unos guantes calefactables que cuentan con unas resistencias térmicas que te permitirán tener las manos calientes en todo momento. A pesar de las condiciones de frío extremo que tienen que sufrir los motoristas en invierno, con estos guantes todo se hará mucho más llevadero.

Este producto incorpora un sistema térmico único en su género que permite que un hilo conductor de calor se introduzca entre dos membranas de tejido. Alimentado con 12V, se calienta y difunde calor por toda la superficie, haciendo que el frío no se note en absoluto.

Podemos conectarlos de dos formas distintas. La primera, la más económica, es conectándolos a la batería de la moto. La segunda, mucho más práctica, incorpora una batería que es capaz de funcionar sin interrupción durante unas 9 horas si está recargada.

Podrás hacerte con unos guantes como estos en www.sgmracing.com por unos 140 euros.

Siempre es agradable subir al coche con buen olor. La mayoría de los ambientadores que se compran en el mercado duran poco tiempo o tienen un olor demasiado artificial. Si quieres conducir con un aroma agradable en la atmósfera del interior del vehículo, te contamos como preparar unos aromatizantes naturales y perfumar con las fragancias que más te gusten.

Prepara una cocción de pieles de naranja y canela en agua. Luego deja enfriar y gurada la solución en un frasquito dentro del coche.

Tritura unas ramitas de canela y otras de romero, introdúcelas en alcohol durante un par de días. Luego retira, deja secar un poco y coloca dentro de una bolsita de tela.

Macera eucalipto y pétalos de rosa secos, colócalos en un botecito y agrega un poco de esencia de vainilla. Finalmente, coloca dentro del vehículo.

Coloca aceites de frutas o de vainilla con una pequeña cantidad de alcohol dentro de un frasco. De vez en cuando destápalo para perfumar el habitáculo por completo.

Deja secar dos rosas, guarda los pétalos en un recipiente tapado, aplica algunos aceites aromatizantes que te gusten, deja que se mezclen durante unos 15 días y vierte la preparación en un frasco para dejarlo en el coche.