Mitsubishi ha querido hacer más potente al Montero y lo ha conseguido. Para ello han modificado el motor 3.2 DI-D que tan buenos resultados ha dado. Ahora ofrece unas prestaciones mucho mejores, aumentando de potencia en casi 40 CV para llegar hasta los 200 CV. Nada mal para un todoterreno diésel de los más feroces del mercado.
El motor ha experimentado cambios en prácticamente todos sus componentes. Mejoras en los pistones, en los rodamientos, en el árbol de levas, en el tren de válvulas, en el sistema de inyección, en la bomba de aceite… todo para conseguir un par máximo de 441 Nm a 2.000 RPM, un 16% más que la antigua versión de 160 CV y un 18% más que la de 170 CV. Además, se ha añadido una caja de cambios automática que también es novedad.
Según Mitsubishi, con los cambios se ha conseguido reducir el consumo en un 17%, lo que hace que las cifras se acerquen mucho a las de un todocamino como es el Outlander (alrededor de los 8 litros por cada 100 kilómetros recorridos). A pesar de ello, no escapa del 14,75% del Impuesto de Matriculación.
La insonorización es otro de los puntos fuertes. La marca ha trabajado duro para insonorizarlo tanto por dentro como por fuera. Los cristales delanteros son ahora más gruesos, el parabrisas está mejor aislado y se ha modificado tanto el vano como el motor para que haya menos ruido especialmente por culpa de las vibraciones.
También incorpora nuevas tapicerías y nuevos colores para la carrocería. Se ha mejorado el navegador, el Bluetooth se puede controlar desde los mandos del volante y hay alguna que otra mejora más en cuanto a equipamiento se refiere.
¿Saldrán más caros estos cambios? De momento no se conoce nada acerca del precio. Se pondrá a la venta a partir del 15 de diciembre.