Diferencias entre el BMW X6 y el BMW X4

Un día después de que Alex os lo contara todo sobre el BMW X4, creo que es un buen momento para analizar las diferencias que podemos encontrar entre el nuevo SUV de la firma alemana y su hermano mayor, el BMW X6.

Ambos responden al galáctico concepto que se han sacado de la manga: «Sports Activity Coupé«. Son modelos de grandes dimensiones, pero eso no quiere decir que sean robustos y sin forma alguna. Todo lo contrario. El X6 ha triunfado por sus líneas deportivas, y el X4 seguirá sus pasos, porque además será más accesible.

A continuación voy a contaros todas las diferencias que existen entre ambos. Si me dejo alguna, ya sabéis que podéis dejar todos los comentarios que queráis.

Dimensiones

El X6 es más largo, ancho y alto. En concreto, mide 4.877 mm de largo, 1.984 mm de ancho y 1.689 mm de alto. Es bastante más que el X4, que se conforma con unas dimensiones de 4.671 mm de largo, 1.882 mm de ancho y 1.623 de alto

En lo que al maletero se refiere, el X6 ofrece 569 litros de capacidad, mientras que el X4 supera por poco los 500 litros (501 para ser más exactos).

Frontal

Las diferencias aquí son muy evidentes. El X6 es un modelo con 6 años de antigüedad que ha sufrido algún que otro ligero restyling a lo largo de su vida comercial. Eso, quieras o no, se nota. El X4 adopta el nuevo lenguaje de diseño de BMW, con unos faros de nueva factura que se integran en su parrilla ovoide (con forma de huevo). En el X6 los faros no están integrados.

Los faros antiniebla del X4 están mucho más arriba. En el X6 están a la altura de la matrícula. Para terminar, en el capó podemos apreciar nuevos pliegues, siendo los centrales los que más han cambiado. En el X4 no son tan verticales.

Lateral

Si nos vamos al lateral, lo primero que tenemos que decir es que la caída del techo es prácticamente idéntica. Se empieza a inclinar a la altura del pilar B y culmina su bajada al llegar al alerón trasero. A diferencia de lo que hemos podido ver en los últimos modelos de los de Múnich, el nuevo X4 no tiene branquias en los guardabarros delanteros para favorecer el flujo de aire, pero sí las luces de señalización que también monta el X6.

Podríamos decir que es la parte del coche en la que más similitudes encontramos.

Zaga

En la parte trasera también se repiten casi todos los patrones. Solo hay algunas pinceladas que hacen que el X4 sea más atractivo.

Es verdad que la forma de los grupos ópticos traseros no cambia demasiado, pero del X4 están mejor integrados, transmiten una mayor sensación de movimiento.

El parachoques trasero de uno y de otro no tiene nada que ver. Es más, hasta el difusor ha sido modificado por completo. El diseño y la colocación de los tubos de escape varían en función de la versión elegida, así que es difícil dar una valoración genérica. En la imagen que podéis ver sobre estas líneas, los del X6 son de forma trapezoidal y están repartidos uno a cada lado, mientras que en el X4 son dos salidas circulares que se concentran en la parte izquierda.

Interior

En el interior se destapan las miserias (o las virtudes, según cómo se vea) de BMW. Sea cual sea el modelo elegido, le falta personalidad, es demasiado soso. En líneas generales nos topamos con el mismo habitáculo, ya que solo hay pequeños cambios: en el panel de control del sistema de climatización y en el salpicadero (en el X4 el tirador de la guantera está a la vista). En este apartado han evolucionado más bien poco.